Institucional


Nuestros orígenes

El 30 de mayo de 1907, se inauguró el Colegio-Asilo “Santa Catalina”, gracias al Fundador de la Congregación de Hermanas del Rosario de Buenos Aires, en aquel entonces Presbítero don José Américo Orzali; a la generosidad de la Sra. Catalina Harriet de Rospide,  donando el terreno y cinco habitaciones para su funcionamiento y al pueblo de Trenque Lauquen que colaboró desinteresadamente en la concreción de este proyecto.

Con su primera Superiora, Hermana Julia de la Eucaristía,  y sus colaboradoras, las Hermanas Margarita de Jesús, Virginia de la Cruz y Josefa de María, se iniciaba un fructífero camino de entrega y servicio de tantas religiosas y laicos que construyeron y construyen día a día la historia del Instituto Ntra. Sra. del Rosario de Trenque Lauquen.

Al festejar el colegio sus primeros 25 años de vida, el periódico “La Unión Española” decía: “…Así es que debido a la caridad de algunos vecinos y al heroico sacrificio de las Hermanas, que en algunos casos se ven obligadas a pedir limosna, es como sigue este importante establecimiento derramando su valioso aporte al progreso y a la cultura de nuestra población.”

Profesorado

En marzo de 1972, por intermedio de la Superintendencia de Enseñanza Privada, se autorizó la apertura del Instituto del Profesorado, comenzando a funcionar en abril del mismo año, con dos carreras: Matemática-Física-Química y Geografía. Era Rector el Sr. Avelino Reyero y Secretaria, la Hermana Elizabeth de María. La inscripción alcanzó los 70 alumnos.

En 1975, egresaron como profesores de Matemática-Física-Química: Marisol Concepción, María Elena Cicconi, Edgardo Balbo, Beatriz D. Molinaro, Stella M. Iturrieta, José Calderaro, Silvia Castro, María Eugenia Pérez, Bernardino Alonso, Antonio Soriano y Lucía Cassán. De Geografía: Marta Santomingo, Emilia Rodríguez, Ana Lía Palomeque, Ana María Zulberti, Luisa Smith, M. Fátima Spain, María E. Lombroni, Imelda Fuhr, Angélica Spinelli y Celia Siri.

Aunque en 1976 cesó sus actividades, dejó ese semillero de profesores de los cuales algunos, aún hoy, continúan realizando su labor educativa en distintos colegios de nuestra ciudad. En aquellos años, estos flamantes egresados cubrieron una importante necesidad que, de otra manera, hubiera tenido que reemplazarse por docentes de otros lugares.