Con fervor cada una de nuestras comunidades celebró al Corazón de Jesús.
Esta oración frente al Santísimo, con silencio, canto y Palabra es una bella tradición del Instituto.
¡Gracias a todos por conservarla!
Que Él se los retribuya en las gracias que cada uno más necesita y que cambie nuestro corazón de piedra en corazón de carne!